Todo empezó en el año 1995, año en el que nuestra marca de intermediarios de crédito llega a España procedente de Italia, donde se fundó y empezó a operar un año antes.

La primera oficina Kìron en nuestro país se abrió en Barcelona. Poco después, Kìron empezó a crecer por todo el territorio nacional y a trabajar de manera conjunta con Tecnocasa.

En estos 30 años, Kìron se ha mantenido como líder del sector de la intermediación financiera, cubriendo un nicho de mercado poco conocido en sus inicios, pero muy necesario y complementario al servicio de la intermediación inmobiliaria.

Cubrir ese nicho permitía ofrecer a todos nuestros clientes compradores la posibilidad de tener un servicio completo de 360 grados que les ofrecía, además de la búsqueda de su vivienda, la obtención de la financiación necesaria para su adquisición.

En 30 años una empresa vive muchas y variadas situaciones, siempre marcadas por la situación económica y social que atraviesa el país en ese momento.

Y, como todos podemos imaginar, los 30 años de Kìron han estado marcados por muchas y variadas situaciones de mercado, pero siempre nos hemos mantenido líderes en el sector.

En tres décadas hemos vivido momentos de plenitud económica y de gran actividad comercial, y años duros, como la crisis de 2008 o, sin ir más lejos, la crisis sanitaria de la COVID-19, pero sin duda, el importante Know how de Kìron y el empeño, el trabajo duro y la profesionalidad de todos sus miembros han hecho posible que la marca supere siempre cualquier obstáculo, convirtiendo las dificultades en oportunidades y los retos en aprendizajes.

El propósito de las empresas grandes y exitosas es seguir adelante, mejorando constantemente y logrando la satisfacción de sus clientes, y este es el caso de Kìron, que centra todo su trabajo en la búsqueda de la mejor solución hipotecaria para sus clientes. Un trabajo en equipo con nuestras redes inmobiliarias que aportan un plus a nuestro grupo y nos hacen diferentes a otras redes del sector.

¡Felicidades, Kìron!
A por 30 años más.